El proyecto persigue conocer el grado de amabilidad que presenta la infraestructura peatonal en el entorno urbano del barrio de Iturrama. Como resultado de la metodología empleada se obtendrá información tanto sobre datos más técnicos como de la opinión de los viandantes sobre los factores que más les afectan.
Además, este análisis será la base para el diseño de rutas escolares con las que se pretende potenciar los desplazamientos peatonales y en bicicleta de los niños y las niñas hacia y desde sus centros escolares, buscando que estos desplazamientos sean además de seguros, motivadores y fomenten el desarrollo infantil en el entorno urbano y la mejora de su autonomía.
Para el trazado de la nueva capa de red peatonal ha servido como base los datos técnicos más actualizados con los que cuenta la ciudad. Además, se crea una nueva capa de la red caminable formada por aceras y cruces. Para alimentarla hemos realizado un importante trabajo técnico recopilando los datos de las calles, de cada uno de los tramos de acera y cruces que forman esta trama en el barrio de Iturrama.
Dentro de la toma de datos para analizar las características de la caminabilidad del barrio y poder calibrar el cálculo de flujos peatonales se han realizado conteos de las personas que caminan por la calle.
De forma complementaria a la base técnica del análisis se ha diseñado una estrategia para incorporar la participación tanto de los residentes o viandantes habituales en el barrio de Iturrama como del tejido asociativo del barrio, abierta también a la ciudadanía del resto de la ciudad.
En primer lugar, se realizó un Taller Técnico de presentación del proyecto y de la consulta ciudadana prevista. La consulta, en formato de encuesta, persigue conocer en qué medida influyen a las personas que caminan por el barrio cada uno de los factores que se tienen en cuenta para definir el grado de caminabilidad.
Se ha realizado también un taller de exploración urbana y mapeo colectivo y acciones con colectivos como el Grupo de Paseo de Iturrama.
El proyecto analiza cómo las características de las calles afectan de manera distinta a las personas que caminan teniendo en cuenta edad, diversidad funcional y perspectiva de género.
La entrega del documento final está prevista en diciembre.